Las tardes al sol


Todos los días –a veces por un rato, otras por unas horas– subo a la azotea a leer acompañada de mis perritas. Procuro subir textos para tesis; el sol, el aire fresco, las plantas y los ruidos de pájaros e insectos me ayudan a sentir/pensar. A veces subo también la novela en turno o libros de actividades manuales, para hojearlos. 

Arriba puedo leer en voz alta a mi antojo. Bajo o fuerte, con entonaciones extrañas y en lenguas diversas. A Luna y Ciruela les gusta escucharme, igual que cuando, mientras paseamos, canto. 

Y así paso un rato de estos días de cuarentena, como a veces los fines de semana cotidianos, escuchando los cantos de pájaros urbanos y sintiendo el viento a través de las hojas de plantas que crecen en maceta. Todo eso recostada en el suelo, junto a mis perritas peludas. 

Comentarios

  1. Con o sin cuarentena tu esencia te define siempre. Te conozco mucho aunque aún no te he escuchado cantar. Gracias por estos relatos únicos.

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  2. Gracias a ti por leerlos, querida Lety. ❤️

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